Pérdida de subsidios amenaza la atención médica asequible para la comunidad latina del condado de Napa

Getting your Trinity Audio player ready...
OLE Health es el segundo proveedor de atención médica más grande del condado de Napa y ofrece servicios a todos, incluidos aquellos que no pueden pagar. Foto de archivo.

Si el Congreso no renueva los principales subsidios federales de atención médica que expiran a fin de año, las primas para los latinos en California podrían aumentar hasta un 122%, convirtiéndolos en uno de los grupos más afectados.

Sin una acción rápida del Congreso para extender los créditos fiscales mejorados para las primas como parte de un acuerdo de financiamiento, las facturas mensuales de seguro médico para todos los afiliados a Covered California podrían casi duplicarse a partir de enero.

En el condado de Napa, las consecuencias son especialmente graves.

Casi el 90% de los residentes inscritos a través de Covered California dependen de subsidios para poder pagar su cobertura, según los datos más recientes disponibles de junio. Aproximadamente 5,830 miembros locales reciben asistencia financiera, en comparación con solo 610 que pagan el precio completo.

Los latinos son el segundo grupo demográfico más grande del condado de Napa, y muchos dependen cada vez más de las clínicas comunitarias como su principal fuente de atención médica.

“Tengo miedo por el bienestar general de mi familia”, dijo una residente de Calistoga, quien pidió mantenerse en el anonimato debido al estatus migratorio de algunos de sus seres queridos. “Pero encuentro algo de tranquilidad al saber que, por ahora, podemos acudir a clínicas comunitarias que nos reciben sin importar nuestras circunstancias.”

El acceso a la atención médica para los inmigrantes sigue deteriorándose.

A partir de enero de 2026, los adultos de 19 años o más sin estatus migratorio legal ya no calificarán para Medi-Cal de cobertura completa. Los legisladores estatales revirtieron la expansión del programa para abordar el déficit presupuestario de miles de millones de dólares de California, luego de que los costos superaran ampliamente las proyecciones.

La ley federal prohíbe el uso de fondos federales para ofrecer cobertura médica a personas indocumentadas, por lo que el programa dependía exclusivamente del financiamiento estatal. California había sido uno de los apenas 14 estados que ofrecían seguros financiados por el estado sin importar el estatus migratorio.

“Soy una persona soltera y trabajadora independiente, tengo 58 años y dependo de Covered California para obtener medicamentos y tratamientos esenciales”, dijo una participante durante un foro comunitario la semana pasada con la directora ejecutiva de Covered California, Jessica Altman, y el congresista Mike Thompson (D-St. Helena).

“Con el crédito fiscal, mi prima es de $234 al mes, pero sin él, Anthem la fija en $1,646. ¿Qué se supone que debemos hacer? ¿Tiene California un plan para personas como nosotros?”

La carga financiera recaería de manera desproporcionada sobre las comunidades de color. Las primas para los residentes asiáticos e isleños del Pacífico aumentarían un 112% y un 106% para los afroamericanos, según los datos más recientes de Covered California.

Estas disparidades reflejan cuánto dependen distintas comunidades de los subsidios federales para mantener su cobertura médica asequible. Debido a que muchos hogares latinos, afroamericanos y asiáticos califican para subsidios más altos según sus ingresos, la pérdida de esa asistencia financiera provocaría que sus costos promedio de bolsillo aumenten con mayor fuerza que los de otros grupos.

Los residentes de bajos ingresos también sufrirán en gran medida el impacto del recorte previsto de subsidios. Las personas que ganan menos de $62,600 al año verían sus primas mensuales aumentar de $97 a $182, según estimaciones de la oficina del gobernador Gavin Newsom y de funcionarios estatales de salud.

A modo de comparación, el trabajador promedio de los viñedos en el condado de Napa gana menos de $50,000 al año.

“Estamos hablando de estadounidenses y de personas en nuestra región que podrían perder su cobertura médica porque ya no podrán pagarla”, dijo el congresista Mike Thompson. “Muchas personas antes se sentían atrapadas en sus empleos solo para mantener su seguro. La Ley de Cuidado de Salud a Bajo Precio cambió eso al ofrecerles un lugar donde comprar cobertura y la libertad de convertirse en emprendedores.”

El período de inscripción abierta comienza el 1 de noviembre, y los afiliados de Covered California ya están recibiendo avisos que muestran cuánto más podrían tener que pagar el próximo año si no se alcanza una resolución en Washington en las próximas semanas.

Para ayudar a los residentes a navegar los cambios inciertos, la Mesa Redonda de Líderes Latinos organizará una conversación titulada “Atención médica y la comunidad latina”, donde se analizará cómo estos cambios en las políticas podrían transformar el acceso a la atención en el condado de Napa.

Covered California y los mercados de seguros de todo el país también se están preparando para el año del plan 2026, con el objetivo de guiar a los consumidores a través de los posibles cambios si los subsidios mejorados no se renuevan.


Sponsored


Author

Mariela Gomez is a bilingual journalist covering public policy, local politics and culture across California. She is the editor of Conéctate, one of Napa’s first and only Spanish-language news sources dedicated entirely to Latine stories. Gomez is a graduate of the USC Annenberg School of Communication and Journalism. 

Your support helps expand free, accessible reporting for our community.

Give today and be part of what comes next.

Close

Local journalism in Napa Valley is growing stronger.

Want to do some good? ✨